Oculto dentro de una taza de porcelana.
Si tuvieras que elegir un grano en el mundo como el más preciado, ¿Cuál sería?
En culturas antiguas, muchos granos fueron considerados sagrados, y el alimento o bebida producidos a partir de éste, se consideraba como el alimento de los dioses.
Pero, ¿Habrá sobrevivido alguno de estos a asaltos, piratas y tempestades? ¿Ser la causa de una polémica religiosa que requiriera su bautismo para poder ser aprobado por la sociedad de aquel entonces? o quizás, ¿Haber sido considerado de tanto valor que pudiera concederle a un hombre el indulto o, en caso de haber dañado el árbol, ser castigado con la pena de muerte?
En la actualidad, el café es uno de los principales productos de origen agrícola que se comercializan en los mercados internacionales, su cultivo está culturalmente ligado a la historia y al progreso de muchos países.
ORIGEN
Los datos arqueológicos de los que disponemos hoy día, no nos permiten determinar un punto exacto del origen, pero muy probablemente provenga de Etiopía. La distribución de los cafetos en África sugiere que la planta crecía de forma silvestre o en cultivos a lo largo del continente desde la antigüedad.
En el siglo XV el café fue introducido por los árabes a Persia, Egipto y África Septentrional y llegó a ser la causa de grandes debates a tal punto que una ley turca sobre el divorcio estipulaba que una mujer podía divorciarse de su esposo si éste no le proporcionaba una ración diaria de café, luego fue prohibido en Europa por creer que su ingesta favorecía el espíritu crítico. Para los amantes del brebaje ésta prohibición no duró mucho tiempo, ya que tras haberlo probado, el papa Clemente VIII lo bautizó, declarando que dejar solo a sus infieles el placer de esa bebida, sería una lástima.
El café fue muy bien recibido por los monjes, por otro lado, fue reprobado por los sectores protestantes. En Alemania se puso en marcha un sistema para prohibir su difusión hasta que Federico II de Prusia despenalizó su consumo y lo sometió al pago de un fuerte impuesto.
Su consumo también estuvo prohibido en Rusia con penas de tortura y mutilación, y cuando la policía llegaba a encontrar a una persona víctima de una crisis nerviosa, se lo atribuía al café. No fue hasta el siglo XVIII que el café logró su total aceptación social.
Pero el proceso de propagación del grano por todo el mundo, no fue simple, la historia de las más de 2250 tazas que se consumen a diario a nivel mundial, es una historia llena de tragedias, asaltos y sacrificios.
Refiriéndonos específicamente a los sacrificios, el más notable, o el que ha llegado a ser considerado "El episodio más romántico en la historia de la propagación de la planta del café", es el del oficial de la marina francesa: Gabriel Mathieu de Clieux.
En Mayo de 1723 partió hacia su propiedad en la isla de Martinica con un esqueje del árbol de París. Para el viaje, De Clieux colocó su preciada planta en una caja hecha en parte de cristal para que pidiera absorber la luz del sol y conservara el calor en los días nublados. En una ocasión, uno de los tripulantes que quizás envidiaba a De Clieux, intentó arrebatarle la planta, pero no lo logró.
Además de haber sobrevivido a ese ataque, el plantón también sobrevivió a un encuentro de piratas tunecinos, a una violenta tempestad y a lo peor de todo: la escasez de agua que se produjo cuando el barco quedó inmóvil en la zona de calma ecuatorial, De Clieux escribió: "El agua escaseaba de tal manera que durante más de un mes me vi obligado a compartir mi pequeña ración con la planta en la que había depositado todas mis esperanzas y que era la fuente de mi alegría".
Y es que entonces, poseer un cafeto o sus semillas, era una gran cosa. De manos de un delincuente que escapó de Surinam llegaron las primeras semillas a la Guayana Francesa en 1722, a cambio de su botín, las autoridades acordaron concederle el indulto y fue repatriado.
¿Quién pensaría, al tomar una taza de tan deliciosa bebida, que guarda una historia de interés mundial?
13 décembre 2018
