LEER y ESCUCHAR: BASES para COMPRENDER al APRENDER un IDIOMA.
La comprensión lectora es la capacidad para entender lo que se lee y solo se puede lograr si el lector conoce, en primera instancia, el significado de la mayoría de las palabras. Pero comprender va más allá de leer: Es un proceso mediante el cual se asimila lo leído, se piensa, se razona y se otorga un significado. Este proceso implica el reconocimiento de información previa que se actualiza con la nueva.
Es una habilidad que permite desarrollar el pensamiento crítico. Por eso, la lectura es una actividad mental que debemos ejercitar todo el tiempo. La lectura comprensiva se da en distintos niveles por que los lectores captan de forma diferente. Leer a diario es indispensable para desarrollar un buen nivel de comprensión.
Cada lector comprenderá el texto escrito dependiendo de su capacidad para entender y de su capacidad para darle significado a las ideas relevantes, de asimilar, analizar e interpretar el mensaje escrito y de relacionar el contenido del texto con los conocimientos previos que cada uno posee; de la habilidad y de la práctica que cada uno tiene de la lectura.
¿Qué factores son importantes en la comprensión de la lectura?
- El conocimiento que el lector tiene del significado de las palabras del texto.
- Las ideas, vocabulario, conceptos y la cultura de cada lector.
- La capacidad para cuestionar y juzgar un texto.
- En el caso de una segunda lengua, los modismos y expresiones típicas del idioma.
Estrategias útiles para la comprensión lectora
Estas que aquí describo, son en realidad técnicas de estudio, pero que benefician sin duda alguna la práctica de la lectura sobre todo, por que provocan resultados positivos en los alumnos y los motiva a seguir leyendo.
Mapas Conceptuales: Son diagramas que ayudan a entender un tema específico al realizar conexiones visuales entre elementos que conforman dicho tema.
Crear un mapa conceptual puede ser una excelente forma de ayudar a la comprensión de muchos temas que de otra manera podrían resultar complejos ya que al sintetizar la información la comprensión aumenta notablemente.
Los mapas conceptuales ilustran conceptos y relaciones entre conceptos en un texto. Permiten interpretar la información de forma rápida. Pueden ayudar a los lectores a centrar conceptos y entender cómo se relacionan con otros conceptos; ayudan a los estudiantes a escribir resúmenes bien organizados de un texto y a poder explicar con palabras propias lo que entendieron; a revisar el contenido y relacionar lo que han aprendido con lo que ya saben; también aprenden a hacerse preguntas que les obligan a combinar la información de los diferentes segmentos de un texto; a identificar o a generar ideas principales; conectar las ideas centrales y recordar lo leído. Un mapa conceptual ayuda a los estudiantes a comprender un tema de forma rápida y efectiva de manera visual.
Mapas mentales: Son representaciones gráficas de temas o conceptos que ayudan a las personas a organizar la información en un espacio definido. Ayudan a establecer conexiones entre ideas y tópicos de diversas índoles. Son una herramienta visual concreta que puede contener información sintetizada de manera muy eficiente. Son útiles para comprender un tema, concepto o idea; también para jerarquizar o conectar diferentes aspectos y así incrementar la comprensión. Estimulan el pensamiento creativo; sirven para fomentar la concentración y desarrollar la memoria.
Diferencias entre mapas conceptuales y mapas mentales
Mapas Conceptuales
- La información tiene una jerarquía específica.
- La estructura suele ser con variadas ramas y agrupaciones.
- Muestra relaciones sistemáticas entre conceptos, en relación a uno principal.
- Hacen uso de formas rectangulares u óvalos para el texto, y de conectores con etiquetas de texto que muestran la relación con el siguiente concepto.
Mapas Mentales
- La información se desarrolla según la recordamos, sin necesidad de una jerarquía.
- La estructura del mapa mental es radial.
- Muestra subtemas de un tema principal de una forma creativa y libre.
- Habitualmente se comienza por una burbuja central y se extiende por distintas ramas con texto, color, imágenes o pictogramas.
Ahora bien, como adultos, tendemos a aprender acumulando vocabulario, sin darnos cuenta que en contexto real, no entenderíamos la mayoría de esas palabras sin usarlas en una frase, conversación, diálogo. Mas allá de memorizarlas es importante leer constantemente y escuchar, ver películas o programas de televisión. El aprendizaje de un idioma sucede por acostumbrar el oído y una vez superado esto tiene sentido. No puedes memorizar un montón de palabras y reglas y pretender hablar el idioma; todo ese esfuerzo constante no da mejores resultados. Dominar una lengua no es cosa de talento.
“Lo importante es la motivación y el tiempo que se le dedica” (Steve Kaufmann).
Aunque el cerebro de un adulto ya no es tan flexible como el de los niños, ¡sí que podemos ser tan curiosos como ellos! La motivación está vinculada al éxito en el aprendizaje de idiomas.
Conversar en el idioma que queremos aprender, también forma parte de la lista, ya que nos ayuda en la pronunciación de las palabras, a mejorar el acento y a vencer los miedos.
Y sí, podrá ser complicado pero recuerda que estás aprendiendo una habilidad. Saborea los momentos embarazosos, sobre todo durante los primeros meses, y no tengas miedo al fracaso o al ridículo. Asume que tu acento no es perfecto y que no lo comprendes todo.
Nada de eso importa a largo plazo.
¡Lo que importa es el compromiso!
Herminia Rodríguez.
28 de Julho de 2020