PRESENTE PERFECTO
Presente perfecto
El presente perfecto, también llamado antepresente (y también, de forma más amplia, llamado pretérito perfecto compuesto) es un tiempo verbal de aspecto perfectivo propio del modo indicativo (aunque también existe un pretérito perfecto compuesto en el modo subjuntivo).
El presente perfecto se usa cuando se quieren indicar acciones que han sido completadas por completo en un tiempo reciente al actual o a aquél en el que se sitúa el hablante, o cuando se quiere enfatizar esa proximidad temporal.
Por ejemplo, la oración «he desayunado cereales» indica que la acción («desayunar») se ha producido hoy. No tendría sentido utilizar el presente perfecto si la acción se hubiera producido ayer, o hace una semana (en esos casos diríamos «desayuné», es decir, utilizaríamos el pretérito perfecto simple).
Como se puede observar, la formación del presente perfecto es la habitual en los tiempos perfectos del español: se conjuga primero el verbo haber, en presente de indicativo, y posteriormente se añade el participio del verbo principal. El resultado es el siguiente:
Yo he desayunado
Tú has desayunado
Él/Ella ha desayunado
Nosotros hemos desayunado
Vosotros habéis desayunado
Ellos han desayunado
Desayunar es un verbo de la primera conjugación. Los verbos de la segunda y de la tercera conjugación construyen su presente perfecto exactamente de la misma manera («he bebido», «he sentido», etc.).
El presente perfecto es un tiempo complejo por la doble temporalidad que le aportan sus dos componentes. Mientras el verbo auxiliar se conjuga en presente, el verbo principal lo hace en participio pasado. Mientras el sujeto permanece en el presente cuando habla, la acción es pasada y está finalizada.
Sin embargo, el presente perfecto tiene una connotación temporal adicional. Cuando lo utilizamos estamos dando a entender que la acción no es simplemente reciente, sino que es también relevante. Siguiendo con el ejemplo del desayuno, si a lo largo del día nos encontráramos mal y pidiéramos consejo a un doctor, éste nos preguntaría: «¿qué has desayunado hoy?», y utilizaría el presente perfecto para remarcar la relevancia del hecho en el tema del que se habla.
Como decíamos al principio, el presente perfecto puede emplearse también para «acercar» acciones al tiempo del sujeto, recuperando su importancia o subrayándolas.
Por ejemplo, si dijéramos «hace ya un año que he comprado esta casa», en lugar de la -más correcta y natural- «hace ya un año que compré esta casa», estaríamos dando a entender que el acto de «comprar esta casa» es algo reciente e importante para nosotros, o bien que nos sentimos «como si la hubiéramos comprado ayer», por utilizar una frase hecha.
January 27, 2020