Los entresijos del Modo Subjuntivo – Parte 2
¿Cuándo utiliza un español el modo subjuntivo? ¿Qué diferencia hay entre los modos indicativo y subjuntivo? Saber ambas respuestas determinará que ya estás pensando en español. Así que, ¡ojalá estos artículos te ayuden a lograr este propósito!
Como os comentaba en la Parte 1 de este artículo (ver parte 1 aquí), el principio más acertado a seguir para obtener un nivel más avanzado de español es el llamado principio de NO-DECLARACIÓN sostenido por Ruiz Campillo y Castañeda Castro que dice así: “si el significado de la matriz (oración principal) implica que la oración subordinada (X) es una declaración, entonces usaremos indicativo y en el caso opuesto, subjuntivo” (clicad aquí para ver la referencia web).
Por tanto, es necesario entender muy bien qué significa una declaración (indicativo) y qué no (subjuntivo). Una declaración es la información que un sujeto manifiesta de una manera objetiva para él, e incluso si es una opinión, será cierta para él, implica que es lo que él piensa o sabe (aunque sea mentira).
A continuación, os presento algunos ejemplos en la siguiente imagen no para que la memoricéis, sino para que analicéis y entendáis la diferencia entre ambos ámbitos:
Así pues, si entendemos cuándo el emisor tiene la intención de dar una declaración o no, entonces no tendremos problemas en los siguientes casos donde la oración principal puede tener contexto doble:
1. Yo friego siempre que tú quitas el polvo.
2. Yo friego siempre que tú quites el polvo.
El significado de ambos ejemplos es muy diferente, en el caso 1, informo de un hecho, algo que el sujeto piensa: mientras yo hago una acción, tú haces otra (ambas acciones ocurren al mismo tiempo, son simultáneas). En cambio, en el caso 2 la intención es mostrar una condición, manipulamos la realidad dándole un toque de deseo, o chantaje (para que una acción suceda, tiene que suceder otra).
3. Yo friego si tú quitas el polvo.
La diferencia entre el caso 2 y 3 es sobre lo que el sujeto sabe, piensa o cree real para sí. En el caso 2 no está seguro de que la otra persona realice la acción. Veamos más ejemplos para entender el concepto de certeza:
4. Mi sueño es que viene Claudia y me besa (declaración de que un deseo ocurre).
5. Mi sueño es que me bese Claudia (no declaro, deseo).
En estos dos últimos ejemplos es más visible el grado de certeza que refleja el hablante ante un hecho:
6. La lluvia produjo cortes eléctricos.
7. La lluvia produjo que me quedara sin electricidad.
Obviamente, al usar el modo indicativo (caso 6) el emisor declara una información para él cierta, contrastada, verificada. Sin embargo, en el caso 19 utilizamos el modo subjuntivo porque el hablante no está completamente seguro o porque quiere inhibirse de la responsabilidad de haber declarado un hecho, incluso en contextos donde la verdad del hecho se da por supuesta. En este sentido, quizás se explique mejor con el siguiente diálogo:
- No me gusta que grites
-- ¡Pero si yo no grito!
- Yo no he dicho que grites, he dicho que no me gusta.
Siguiendo con la misma intención del hablante, de restar certeza:
8. Yo no digo que seas tonto, aunque lo seas.
Y a continuación dos ejemplos, donde quizás no quede tan claro, pero intentadlo por favor:
9. Me alegra mucho lo que estás diciendo.
10. Me alegra que lo dijeras.
En el caso 9 la intención es informar de un hecho (declarar), un sujeto dice lo que piensa (“estoy alegre porque lo estás diciendo”), mientras que en el ejemplo 10 la intención es reflejar un objetivo (“es necesario eso para que yo esté alegre”) y no estaba seguro de que fuera a suceder así.
Lo mismo ocurrirá en aquellos casos donde el emisor quiere dar una información sobre algo que identifica o conoce (modo indicativo) o no la tiene identificada (modo subjuntivo):
11. Hablamos de una cosa que tiene cuatro patas.
12. Hablamos de una cosa que tenga cuatro patas.
Supongo que ya vais entendiendo la diferencia, en el caso 11 el hablante tiene identificada la cosa a la que se refiere, por ejemplo: una silla. Sin embargo, si usamos el modo subjuntivo, puede que desconozca el objeto, o puede que entre diferentes objetos con cuatro patas (silla, mesa, cama, etc.) no sabe a cuál de ellas se refiere. Pues aplicaremos la misma lógica cuando se trate de un objeto, una persona, un lugar, un modo, una cantidad o un momento:
13. Quien me quiere VS quien me quiera.
14. Donde te dije VS donde te diga.
15. Como lo hace VS como lo haga.
16. Cuanto necesitas VS cuanto necesites.
17. Cuando llegó VS cuando llegue.
En definitiva, entender la lógica del uso de un idioma requiere una exigencia imperativa de reflexión del lenguaje en general más que de la gramática. Espero pues, haberos ayudado a entender mucho mejor a cómo utilizar esta herramienta sin tener que memorizar una infinita lista sin el menor sentido.
Por favor, si todavía quedan dudas, escríbemelas en el chat o bien reserva una clase conmigo e intentaré ayudarte lo mejor posible.
2018년 7월 27일